¿Alguna vez te has preguntado por qué te cuesta tanto deshacerte de tu acento al hablar inglés? Una de las mayores frustraciones de los estudiantes de inglés hispanohablantes es que su inglés no se entienda, aunque cuenten con buen nivel en gramática o vocabulario.
Entre los hablantes de español, existen ciertos problemas que se repiten a la hora de hablar inglés. Si quieres que tu inglés se parezca cada vez más al de los nativos y manejarte con soltura en conversaciones reales, no te pierdas este artículo con algunos trucos y consejos que perfeccionarán tu pronunciación y speaking.
5 trucos infalibles para pronunciar como los nativos
Afloja las Os
Si, por raro que parezca, en inglés apenas existe el sonido “o” tal y como lo conocemos en español. La “o” inglesa tiene distintas pronunciaciones y matices. Dependiendo de su posición y letras que la rodean, se pronunciará de un modo u otro. Por lo general, es más parecida a un híbrido entre “a” y “o”.
Let’s practise a bit. Prueba a colocar la boca en forma de “o” bien redonda. Ahora intenta pronunciar nuestro sonido “a”. Pues algo parecido a esa nueva vocal es como realmente se pronuncia. ¿Te ha costado? No te preocupes, con práctica y escucha mejorarás progresivamente.
Drop the “T”
Aquí un pequeño truco para soltar la lengua y parecer inmediatamente más nativo: libera las T. Por ejemplo, en lugar de pronunciar las dos “T” en “translation”, transfórmalo en trans-lei-shion.
Otro truco. Cuando la “T” y la “D” aparecen entre consonantes y al final de la palabra, afloja ese sonido “T”, prolonga el anterior y liga las palabras. Por ejemplo: Don’t worry → donn’worry. You must be joking → You muss’be joking. A esta técnica se le llama “linking”, sigue leyendo para descubrir cómo utilizarla.
Separa en sílabas
Un truco fundamental para pronunciar correctamente es separar las palabras en golpes de sonidos y en lugar de ortográficamente (como sucede en español). Saber cuál es la sílaba en la que cae el mayor peso fonético hará que tu inglés se entienda at least diez veces más.
Para aprender a separar las sílabas en sonidos, te recomendamos que las digas en voz alta e intentes no caer en lo que tu intuición te diga como hispanohablante. Te darás cuenta de que el inglés cuenta con muchas más palabras monosilábicas de lo que imaginabas.
Olvídate de las sílabas débiles
Una vez logres separar las sílabas, evita pronunciar todas las vocales por igual y ganarás mayor fluidez hablando. Enfatiza en la vocal fuerte y trata de eliminar la vocal débil, como si dejaras caer la palabra. Algunos ejemplos que te pueden ayudar a comprender este sistema: people (pi-pol ➡ pi-pl), happen (ja-pen ➡ ja-pn)
Llegarás a este punto a base de práctica y haciendo mucho oído. La próxima vez que disfrutes de una película en versión original, presta atención a cómo desaparecen las light syllables.
Link the words
Si en español nos caracterizamos por hablar rápido y no pronunciar absolutamente todas las letras de las palabras, en inglés pasa algo parecido. Es lo que se conoce como linking. Consiste en unir el final de una palabra con el inicio de la siguiente para tener conversaciones más fluidas.
Al principio puede parecer confuso, y lo más habitual es pensar que los nativos no nos entenderán si eliminamos partes al hablar. Sin embargo, ¡suele ser justo lo contrario! Practicando el linking mejorarás tu speaking y entenderás más fácilmente las conversaciones de los nativos.
Consejos para aprender a pronunciar palabras difíciles en inglés
Acude a diccionarios
Cuando tengas dudas sobre la fonética de una palabra, te recomendamos acudir a WordReference, un diccionario completísimo en el que también puedes escuchar cómo se pronuncian las palabras.
Si te genera curiosidad saber cómo se pronuncia una palabra en los diferentes acentos, este es tu sitio web perfecto. Podrás escoger entre británico, estadounidense, escocés, irlandés o australiano para la mayoría de palabras que contiene.
O simplemente busca en Google “pronunciación de” seguido de la palabra que te genera dudas y su asistente virtual articulará la palabra para ti, incluso podrás elegir la velocidad a más rápida o más lenta si te cuesta pillarlo.
Repetición y memoria muscular
Si de pequeños aprendemos a hablar a través de la repetición, ¡también tiene que suceder en inglés! El primer paso, por simple que parezca, es aprender correctamente el abecedario en inglés y distinguir las diferencias respecto al abecedario y los sonidos en español.
Posteriormente, pasa a practicar con palabras completas pronunciadas lentamente y repite, repite y repite. Hablar bien un idioma, al igual que otras habilidades, es cuestión de entrenamiento. Proponte entrenar los músculos de tu boca a base de repeticiones para que ese sonido que tanto te cuesta sea cada vez más fácil de emitir.
¿Te atreves a practicar con las “Palabras más difíciles de pronunciar en inglés”? Anímate al reto con ese listado.
Practica delante del espejo
Una vez hayas memorizado el sonido, es hora de perfeccionar tu vocalización frente al espejo a la vez que te fijas en otras personas nativas. Observa cómo posicionan la boca los actores y actrices en las películas, o los cantantes en los videoclips.
¿Notas alguna diferencia respecto a tu forma de gesticular? ¿Abren más o menos la boca? ¿Dónde posicionan la lengua? Poco a poco te darás cuenta de las diferencias y te servirá para mejorar tu pronunciación.
¡Llamada a todos los amantes de la música! ¿Quieres aprender inglés escuchando tus canciones favoritas? Dale al play y echa un vistazo a nuestro artículo “Aprende inglés por medio de la música”.
Pásatelo bien
El camino es largo, pero puede hacerse mucho más llevadero si te diviertes. Tres formas de hacerlo son:
- Prueba a decir trabalenguas para soltarte. Cada “tongue twister” ejercita un sonido en concreto. Un ejemplo con el sonido /sk/ sería “Ice Cream, I scream, you scream, we all scream for ice cream!”
- Tómate con humor las palabras que se te atascan. ¡Hay algunas que ni los propios nativos pueden pronunciar!
- No tengas miedo a equivocarte, ¡nadie nace sabiendo!
It’s a matter of practice
Como montar en bici, el inglés nunca se olvida del todo… pero sí se oxida. Los parones en la práctica de inglés afectan a todas las skills del mismo (reading, writing, listening y speaking), pero sobre todo afectan a la habilidad más temida: al speaking. Aumenta la frecuencia de tu práctica de inglés para evitar perder fluidez.
Una forma fácil de practicar más es leyendo en alto. Aunque sea un esfuerzo extra que requiere de más tiempo y concentración, te aseguramos que merece la pena. Escucharás palabras que no te cuadren y al final seguro que descubres el modo correcto de pronunciarlo.
Relaciónate con nativos
Esta es la pieza clave para todo tu camino de aprendizaje. Para poder poner en práctica todos los anteriores trucos, nuestra mayor recomendación es que te relaciones lo máximo posible con native speakers. Atenderás en detalle a su pronunciación, aprenderás imitando, descubrirás nuevo vocabulario…
La parte más importante es que no debes avergonzarte de tu acento, sino intentar mejorarlo para que tu inglés sea más comprensible. Si quieres conocer de primera mano el aprendizaje de inglés con nativos, prueba una experiencia de inmersión con nuestros teachers certificados, adaptado a todos los niveles.
Con estos consejos, ¿estás ready para pronunciar como un nativo? Come on!
